Ya son tres las personas fallecidas tras haber contraído el hantavirus durante su estancia en el parque nacional de Yosemite, en California, y hay dos nuevos casos de enfermos que sufren este peligroso virus, ha informado la administración del parque.
"Estamos trabajando estrechamente con las autoridades sanitarias (...) y recomendamos a todos los visitantes que pudieran haber estado expuestos al virus que busquen asesoramiento médico en cuanto sientan los primeros síntomas", dijo el jefe del parque, Don Neubacher.
Los síntomas del hantavirus son similares a los de una gripe: tras un periodo de incubación de entre una a seis semanas, el afectado muestra una elevada fiebre, escalofríos, dolores musculares y cefaleas.
El virus también puede afectar los pulmones o el sistema nervioso y provocar hemorragias. Se transmite a través de excrementos de roedores, sobre todo de ratones, y las personas se contagian al respirar partículas aéreas provenientes de esos restos.
Según las autoridades estadounidenses para el control de epidemias (CDC), en el país se produjeron 587 casos entre 1993 y 2011. Uno de cada tres enfermos murió.
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